Manglares

 

Descripción



Este es un tipo de bosque ubicado en zonas costeras y saladas. Estos incluyen árboles y arbustos adaptados a condiciones ambientales tales como inundaciones por mareas, suelos con poca circulación de aire, poca arena, alta salinidad y factores costeros y estuarios. La madera es resistente a las termitas, soporta la sequía y el agua dulce.

 

Distribución

 

Los manglares están presentes en los 17 estados de la república que tienen litoral. En el estado de Quintana Roo se localiza la mayor superficie de manglar del país y en Baja California la menor. La evaluación más reciente arrojó una superficie de 905,086 hectáreas de manglares en México para 2020.

 

Clima

 

Los manglares son una especie que se encuentra principalmente en los trópicos y en menor medida en las regiones templadas no hay inviernos muy helados. La temperatura es un factor biológico importante el crecimiento de los manglares dará lugar a una mayor transpiración, por lo que la salinidad afecta el crecimiento. La precipitación es otro factor importante. efecto lluvia el limo llega a los manglares y el aumento de las lluvias ayuda a mitigar posibles condiciones demasiada salinidad. Sin embargo, el siguiente factor no es determinante para la supervivencia del bosque de manglar por sus rutas los saleros facilitan la excreción precisa de sal. Además, los efectos del viento y las tormentas pueden ser:

Es importante destacar que, especialmente en las áreas costeras más expuestas, causa daños estructurales al dosel. A pesar de que los manglares son clave para reducir la turbulencia atmosférica, como tormentas y mareas.

 

Flora y fauna

 


Situadas en la zona de transición entre la tierra y el mar, albergan numerosas especies que viven sobre raíces, tallos, ramas submarinas, ramas aéreas y hojas.

En él encontrarás especies como bromelias, orquídeas, helechos y pastos marinos.

Otros ejemplos de especies terrestres que habitan algunos manglares son el jaguar americano (Panthera onca), el aullador (Alouatta pallata), el mono araña (Ateles geoffroyi), el cocodrilo de río y pantano (Crocodrylus acutus) y C. moreletti). Las raíces de los manglares son ideales para muchas especies de peces que las utilizan como lugares de reproducción, protección y reproducción.

Las aves migratorias como la garza azul (Egretta caerulea), la garza roja (Egretta rufescens), el flamenco americano (Phoenicopterus ruber) y el águila de bosque (Buteogallus subtilis) suelen anidar en los manglares. Especies comerciales como cangrejos, jaibas, camarones y langostinos tigre, así como bagres, salmonetes, meros, pargos, percas y truchas también viven y se benefician de los manglares.

Asimismo, el ecoturismo utiliza los manglares para observar aves, vida silvestre y paisajes.

 

Servicios ambientales

 

Los humedales costeros, especialmente los manglares, brindan una amplia gama de servicios ambientales: brindan alimento, refugio y cría de mariscos y larvas de alevines, por lo que sustentan la mayor parte de la producción de peces y se utilizan como combustible (leña). Alto valor estético y recreativo, actuando como sistema natural de protección contra inundaciones y barrera contra tormentas e intrusión de agua salada, control de erosión y protección costera, mejorando la calidad del agua al actuar como filtro biológico, ayudando a mantener procesos naturales como la respuesta al nivel del mar cambios, sustentando procesos sedimentarios, y sirviendo de refugio para la vida silvestre, etc.

 

Impactos y amenazas

 


Los manglares se encuentran bajo una gran presión, principalmente debido a los cambios en el uso de la tierra provocados por diversos factores socioeconómicos. Es decir, se ven afectados no solo por la deforestación directa, sino también por la degradación de los ecosistemas laguneros y estuarinos, las zonas de amortiguamiento y las cuencas hidrográficas que les proporcionan alimento.

Ubicados en el punto más bajo de la cuenca hidrológica, los manglares realizan actividades productivas (ej. agricultura, ganadería, industria) y las comunidades y ciudades arriba. A escala global y regional, se estima que aproximadamente la mitad de los manglares del mundo (alrededor de 32 millones de hectáreas) han sido destruidos y el resto está amenazado por una variedad de factores. Más recientemente, entre 1996 y 2016, el área global disminuyó un 4,3%. Esta pérdida se debe a una serie de amenazas antropogénicas a los hábitats costeros y marinos, incluido el cambio climático. A nivel mundial, el 17% de las especies de manglares se encuentran en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Sin embargo, el 40% de las especies evaluadas en el área están en peligro de extinción. De acuerdo con el sistema de monitoreo de manglares de México, entre 1970 y 1980 se perdieron aproximadamente 92,000 hectáreas de tierra en 2010, y entre 2010 y 2015 se agregaron unas 11,000 hectáreas; El resultado es la restauración de manglares y la recuperación de nuevas áreas.

La pérdida, degradación y fragmentación de este importante ecosistema tiene impactos directos e indirectos en la calidad de los servicios ecosistémicos que brindan los manglares.

 

Legislación

 

  • Norma Oficial Mexicana NOM059-Semarnat-2010, Protección ambiental- Especies nativas de México de flora y fauna silvestres -Categorías de riesgo y especificaciones para su inclusión, exclusión o cambio -Lista de especies en riesgo.
  • Norma Oficial Mexicana NOM126-Semarnat-2000, Por la que se establecen las especificaciones para la realización de actividades de colecta científica de material biológico de especies de flora y fauna silvestres y otros recursos biológicos en el territorio nacional.

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